Brand loyalty, o «lealtad de marca» en español, se refiere a la tendencia o preferencia de los consumidores hacia una marca específica en comparación con las alternativas disponibles en el mercado. Es el resultado de una relación emocional y psicológica entre los consumidores y una marca, basada en la satisfacción, la confianza y la identificación con los valores de la marca.
Cuando los consumidores son leales a una marca, tienden a repetir sus compras de manera regular y preferir esa marca sobre las demás opciones. La lealtad de marca puede manifestarse de varias formas, como la compra repetida, la recomendación a otros consumidores, la disposición a pagar un precio más alto por la marca preferida y la resistencia a cambiar a productos o marcas competidoras.
La lealtad de marca es un objetivo importante para las empresas, ya que puede conducir a una base de clientes sólida y rentable a largo plazo. Al cultivar la lealtad de marca, las empresas buscan establecer una conexión duradera con sus consumidores y generar un valor percibido que los diferencie de la competencia. Estrategias como la calidad consistente, la atención al cliente, la innovación, la personalización y la construcción de una identidad de marca sólida son clave para fomentar la lealtad de marca.
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